Encuentra los productos que necesites

Una planta solar fotovoltaica está compuesta por varios elementos clave que permiten convertir la energía solar en electricidad. Las principales partes son:

1. Paneles solares o módulos fotovoltaicos: Son el componente principal donde ocurre la conversión de la luz solar en electricidad. Están formados por células solares que, al recibir la luz del sol, generan corriente continua (CC).
2. Inversor: Este dispositivo convierte la corriente continua (CC) generada por los paneles solares en corriente alterna (CA), que es la forma de electricidad que se utiliza en la mayoría de los hogares y empresas.
3. Estructura de soporte: Es el sistema que sostiene y orienta los paneles solares para que capturen la mayor cantidad de luz solar posible. Puede estar en el techo de un edificio o en el suelo, dependiendo del tipo de instalación.
4. Sistema de cableado: Los cables son esenciales para conectar los paneles solares entre sí y con el inversor, permitiendo el flujo de electricidad.
5. Baterías (en sistemas con almacenamiento): En plantas solares que incluyen almacenamiento de energía, las baterías se encargan de guardar la energía generada para ser utilizada en momentos de baja radiación solar (por ejemplo, de noche o en días nublados).
6. Protecciones eléctricas: Incluyen disyuntores, fusibles y otros sistemas para garantizar la seguridad de la planta, evitando daños por sobrecargas o cortocircuitos.

Estas son las partes principales, aunque pueden variar dependiendo del tipo y tamaño de la instalación solar fotovoltaica.